Al contrario de lo que muchos pacientes piensan, la higiene dental no sólo implica mantener nuestros dientes limpios mediante el cepillado y el empleo de hilo dental. Si bien es cierto que estos son esenciales, son sólo una pequeña parte de las acciones que garantizan la salud de tu boca. Ésta es importante no sólo para tener una sonrisa bonita, ya que condiciona enormemente la salud de tu cuerpo; que, recordemos, no sólo implica la ausencia de enfermedad, sino un estado de bienestar.

Es posible que haga tanto que no vas al dentista que ya hayas perdido la referencia, o que tu especialista de confianza se haya retirado o desplazado. Si ha pasado mucho tiempo desde la última vez que visitaste al dentista, deberías preocuparte. Es muy recomendable acudir al dentista al menos una vez al año, para que pueda vigilar que no se esté gestando ningún problema y pueda limpiar tus dientes en profundidad.  Sin embargo, es posible que con la abundante oferta te cueste decidirte a escoger un dentista, así que hoy, desde el Blog de la Clínica Dental Higueras, te ayudamos a hacerlo.

La enfermedad de las encías, o periodontitis, es una enfermedad sigilosa. Aunque te parezca mentira, se estima que en occidente la mitad de la población adulta padece éste desorden, también muy frecuente entre los niños. A pesar de estos números increíbles, la mayoría de los enfermos desconocen que sus encías necesitan ayuda. Y es por ello que los especialistas de la salud bucodental han realizado un importante esfuerzo en su práctica cotidiana y en campañas informativas para concienciar a la población del riesgo y la prevención. Hoy, desde el Blog de la Clínica Dental Higueras, os hablamos de cómo prevenir y tratar la periodontitis.

Aunque hasta hace muy poco la pérdida de dientes era muy común, hoy en día no es imposible conservar nuestras piezas originales durante toda la vida. Las mejoras tanto en higiene dental como en atención especializada han permitido alargar enormemente la esperanza de vida de los dientes; de éste modo, cada vez seremos menos los que lleguemos a la vejez desdentados. Aún así, muchas personas utilizan dentaduras, y a pesar de la existencia de mejores alternativas como los implantes dentales aún representan casi el 90% de los dientes restaurados.

Los dientes y mandíbulas alineadas no sólo sirven para posibilitar una sonrisa bonita, también mejoran la capacidad de mordida y tu capacidad de habla, ¡Incluso pueden ayudar a eliminar problemas de ronquidos en el futuro! ¿Por qué necesita tu hijo una ortodoncia? Si el dentista ha detectado algún problema de dientes o mandíbulas, una ortodoncia infantil puede ser la mejor hoja de ruta. A veces no existe un problema médico, pero una ortodoncia puede convertir los dientes apiñados y torcidos en una sonrisa perfecta.

La retracción de las encías es un síntoma con muchas causas, para determinar cuál es el problema tendrás que acudir a un especialista. Sin embargo, exponemos ahora los principales factores de riesgo que más comúnmente se asocia con éste desorden.

Visita a tu dentista mínimo, una vez al año. Que nuestros pacientes acudan al dentista regularmente es beneficioso para dentista y paciente, y la mejor forma de mantener una boca sana y lista de problemas. Debes realizarte un chequeo como mínimo una vez al año, idealmente dos.

Muchas enfermedades sistémicas (casi el 90%) se manifiestan en la boca a través de encías inflamadas, úlceras, sequedad y degeneración de las encías. Algunas de estas enfermedades son la diabetes, diversos tipos de cáncer, desórdenes cardíacos y renales, o la Leucemia.

La importancia de la odontología infantil…
Los niños no necesitan ir al dentista hasta que tengan cierta edad”. Esta idea está muy extendida, y afecta en especial a los muy pequeños, que aún no pueden lavarse los dientes por sí mismos o que aún no han perdido ningún diente. La verdad es que lo antes que lleves tu hijo al dentista mejor, el consenso es que en torno al primer cumpleaños es una buena fecha, pero también te servirá como indicador la aparición del primer diente.

La extracción de un diente es un proceso común pero implica cirugía, y tras someterte a ésta intervención necesitarás seguir las instrucciones de tu dentista para garantizar una pronta recuperación. Aunque estos parezcan trucos caseros y de mera conveniencia, es importante que tengas en mente que el cuidado de tu herida en los días inmediatamente posteriores a la extracción puede tener un enorme impacto en la prontitud y calidad de la cicatrización.